ESE TRANVÍA LLAMADO DESEO

 - La muerte. Lo opuesto, es el deseo.

Ayer dejé caer mis huesos en el Teatro Español, donde se representaba "Un tranvía llamado deseo", dirigida por Mario Gas. Me gustó el montaje, me pareció perfecto, con esos toques de música jazz tan apropiados. Me recordó un poco al montaje que hicieron con "Muerte de un viajante" en cierta medida. Entre los actores estaba Ariadna Gil, que interpretaba a Stella de una forma bastante correcta. Al igual que Álex Casanovas en el papel de Mitch. A la interpretación de Roberto Álamo en el papel de Stanley Kowalski se le puede sacar una pega, no se, pero el acento... el ritmo... la entonación, tan del... barrio, hacían difícil ponerse en situación y creerse cien por cien el personaje. Eso sí, la interpretación de Vicky Peña como Blanche du Bois fue simplemente genial, estuvo impresionante de principio a fin.

Y hoy, gran madrugón para hacerme los análisis de sangre anuales de la universidad. En la cola me ha tocado delante una señora del departamento de Química Orgánica que me ha dado un poco de cháchara y que me ha intentado convencer para que me enrolara en un coro: "Vaya voz de bajo que tienes, ¿no has cantado nunca? Pues deberías, porque hacía tiempo que no me encontraba una voz de este tipo en un chico joven...". En fin, ya no son sólo polacas en estado de embriaguez quienes me lo dicen...

Foto tomada prestada de: Noticias Teatrales.